OTRO CASO EXTRAÑISIMO DE OVNIS Y EXTRATERRESTRES.
Nos narra Juan  José Benitez en su libro 100.000 Km. tras los OVNIS un caso muy raro de unos seres de un metro o un metro veinte de altos que descienden de un armatoste parecido a un autobús.
Y este escritor antes de escribir algo que le cuenta un testigo, se asegura de que sea fiable todo lo que cuenta  y que no sea que se quiere dar notoriedad. Este hombre nunca había oído hablar de OBNIS y menos leído algún libro sobre lo mismo, porque este hombre con casi ochenta años era casi analfabeto.
Este buen hombre fue testigo de uno de los más impresionantes "desembarco" de extraterrestres que tengamos noticia. Y he aquí el relato, publicado semanas después. Concretamente el 20 de Septiembre de 1975 en el diario la gaceta del Norte. En esa década hubo muchos casos de avistamientos de OBNIS.
Cuando Juán Rodriguez Dominguez el <palmareño> Puso en conocimiento de sus patrones y convecinos la aventura que acababa de vivir, los hombres y mujeres de AZNALCOLLAR, que conocían al Palmareño de toda la vida y sabian de su horado vivir, quedaron confundidos, ante este caso casi increible.
Juán era el guardián de un extenso melonar situado en la finca el Lunarejo. Propiedad de un prestigioso militar. Y he aqui que una tarde del comentado Septiembre, Juán se encontraba sentado a la puerta de la cabaña existente en ese lugar con la escopeta de dos cañones en sus rodillas, y en aquel instante ante sus ojos desorbitados vió descender un armatoste acosa de cien metros, que el definió más grande que el "viajero" El viajero es el autobus. - Me levanté asustado, y cogí la escopeta. Se abrieron dos puertas de aquella cosa y empezaron a bajar en fila como suelen ir en los colegios.Seres muy pequeños. Descendieron por lo menos de 50 a sesenta seres. Me quedé atónito sin saber que hacer. Llevaban algo en la cabeza que impedia verles bién la cara. Me quedé mirandoles. Se separaron de la fila cinco de ellos y tambien me miraban. De pronto con algo que parecía una linterna me enfocaron la cara y me cegaba. Yo me protegí dentro de la cabaña. De vez en cuando me asomaba y ellos me enfocaban. decidi salir corriendo hacia el pueblo, totalmente asustado. ¿Que hicieron ellos? Me persiguieron. pero siempre a distancia. Por lo menos 300 m. Yo pienso que solo querian que me alejase del lugar. Cuando yo volvia la cabeza me alumbraban con lo que parecia una linterna.¿Seria militares y un elicoptero lo que usted vió? -Rotundamente no. Yo conozco bien a los militares y se lo que es un elicoptero. estos hombrecillos iban vestidos como si fuera un mono de una sola pieza muy ajustada. y de color verde. Llegué al pueblo que estaba a dos km. y me dirigí a casa de mi amo. Les conté el caso y él y su hijo cogieron el coche y fueron al melonar para asegurarsen de que nadie se llevasen los melones.
¿Vieron ellos a esos seres? -Si porque me dijeron que como les vieron fuera del melonar, se vinieron sin intervenir en nada.
Entonces Juán jóse Benitez intentó entrevistar a los dueños para que le dijesen que es lo que habían visto. Pero se negaron rotundamente. por mucho que se intentó. Juán josé Benitez habló otra vez con el buén hombre, y le djo: usted tenía un arma.¿Porque no les disparó? - ¿está usted loco? -Si llego a disparar me arodean y en este momento no estaría aqui. Yo estaba temblando.