Voy a narrar algo de mi biografia. Con mucho cuidado de no aburriros.
Vine a Madrid con 20 años para hacer el servicio militar. Y cuando lo terminé me quede aqui. Mis trabajos siempre ha sido relacionados con los coches. El primero en un taller engrasando y lavando coches. El segundo, de chófer particular. Me cansé de servir a la señora y al señor, y me coloque de taxista. Primero de empleado y luego me compre mi propia licencia. Ya he dicho en otro comentario que he estado 37 años con el taxi.Anteriormente en Villarrobledo he trabajado siempre en el campo.
Como taxista, me vanaglorio de tener la conciencia muy tranquila de no haberle cobrado a nadie ni una peseta demas. Al contrario, estabamos autorizados a cobbrar el exceso de equipaje. Una maleta o un bulto, no se cobra. Cuando son dos, se cobra una. Pues yo no lo cobraba. Mi conciecia no me dejaba hacerlo. Se le cobra al viajero 2500 pesetas por llevarle al aeropuerto y encima le vamos a cobrar 50 pesetas. por una maleta. Pues no me parecia bien.
y en plan de ayudar a la gente lo hacia al máximo. Mi mujer decia que si todos los taxistas fuesen como yo el gremio del taxi sería como una balsa de aceite.
Espero no haberos aburrido demasiado.
Me parece un gesto extraordinario lo que hacías .
ResponderEliminarHola Domingo: a lo largo de mi vida profesional he tenido que utilizar bastante el taxi y el 99% de las veces no he tenido ningún problema lo cual habla bien del gremio. Cuando nos veamos ya te contaré lo que me pasó con uno. Desde luego tu comportamiento ha sido intachable.
ResponderEliminarTe sugiero una cosa: si alguna vez te cambias el nombre de bloguero ponte "EL ONG DE LOS TAXISTAS"
Un abrazo.
Que bien Manchego., me ha encantado tu historia, con ella me has demostrado lo que yo ya pensaba... que eres una bellísima persona. Te diré que yo también he cogido muchos taxis y me he encontrado de todo. Un día, por desconocimiento, le monté un pollo a uno, que luego le tuve que pedir perdón y el pobre me dijo que no pasaba nada, que le gustaban las mujeres con carácter, jajaja
ResponderEliminarHola Domingo, como dice el refrán la cara es el espejo del alma, y tu cara es la de una persona inmejorable, buena, sencilla y honrada, contigo yo también aprendí bastante en las clases de informática, y te estoy muy agradecido, en abrazo amigo
ResponderEliminarRobert me parece muy bien tu consejo. Me cambiaré el nombre.
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